Pescador peruano fue hallado con vida tras 95 días perdido en el mar

 

Esta fotografía difundida el 15 de marzo de 2025 por la Marina de Guerra del Perú muestra a Máximo Napa recibiendo atención médica a su llegada a Paita, Perú. 

 Un pescador peruano fue encontrado con vida en el Océano Pacífico tras pasar 95 días perdido en el mar, informó el sábado la agencia estatal de noticias peruana, Andina. Máximo Napa Castro, de 61 años, partió en su barco pesquero el 7 de diciembre desde Marcona, una ciudad costera al sur del país, pero el mal tiempo lo hizo desviar de su rumbo y perder la dirección, según Andina. Fue encontrado el 11 de marzo por un barco pesquero ecuatoriano en aguas de la costa norte de Perú, gravemente deshidratado y en estado crítico, informó la agencia. 

 Tras su rescate, Napa Castro declaró a medios locales en una emotiva entrevista que logró sobrevivir bebiendo agua de lluvia que recogió en el barco y comiendo insectos, aves y una tortuga. 

 Pasó los últimos 15 días sin comer, informó Reuters. Napa Castro declaró a medios locales que seguía pensando en su familia para "aferrarse" a la vida.

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“Dije que no quería morir por mi madre. Tenía una nieta de pocos meses y la abracé con cariño. Todos los días pensaba en mi madre”, dijo. La hija del pescador, Inés Napa Torres, agradeció a los pescadores ecuatorianos por salvar la vida de su padre. “Gracias, hermanos ecuatorianos, por rescatar a mi papá Gatón, que Dios los bendiga”, escribió en una publicación de Facebook. 

La familia de Napa Castro y grupos de pescadores llevaban tres meses buscándolo. “Cada día es una angustia para toda la familia y entiendo el dolor de mi abuela porque como madre la entiendo (…) Nunca pensamos que pasaríamos por esta situación; no se la deseo a nadie; no perderemos la esperanza, papá, de encontrarte”, escribió su hija el 3 de marzo en Facebook. Napa Castro recibió controles médicos en el Hospital Nuestra Señora de las Mercedes en Paita, cerca de la frontera de Perú con Ecuador, y fue dado de alta el sábado, informó Ecuavisa, filial de CNN.

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Un pescador cayó al mar y nadó cuatro horas hasta la costa en Uruguay: “Era sobrevivir o abrir la boca y ahogarme”

 

Matías Pereyra, de 24 años, relató que tuvo diez calambres mientras nadaba y que el agua lo ayudó: “La mar me ayudó al tirarme para afuera” Matías Pereyra, un pescador de 24 años, había salido a pescar con dos amigos. 

Estaba a unos tres kilómetros de la costa de La Pedrera, uno de los balnearios más conocidos de Rocha (Uruguay). El hombre cayó de la embarcación en la que estaba y, al darse cuenta que el equipo de rescate no lo veía, comenzó con una travesía: decidió nadar hasta la arena para poder sobrevivir. Era eso o morirse ahogado en el Océano Atlántico, contaría más tarde.

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El joven estaba a bordo de la embarcación de pesca artesanal María Ximena este domingo, según el comunicado de la Armada informado por El País, y avisó que se iría a dormir en la popa. Pero cuando uno de los compañeros se acercó, él ya no estaba allí.

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Los compañeros que quedaron en la embarcación le comentaron a la Prefectura de La Paloma lo que estaba sucediendo: faltaba un compañero en la barca y, además, no tenía un salvavidas. Entonces, a la hora 17.55 comenzó el dispositivo de rescate del joven. Lo buscaron por agua y por tierra. Otras seis embarcaciones de pesca artesanal navegaron por el Océano Atlántico en busca del joven colega.

Durante más de dos horas la búsqueda no dio resultado. Pero a las 20.15, la Prefectura fue avisada de que el joven había salido por sus propios medios a la playa del Barco, en La Pedrera, a unos 9 kilómetros de donde había caído. Pereyra estaba en estado de shock, pero no tenía ninguna lesión. Sin embargo, igualmente fue trasladado a una policlínica cercana de ASSE (el prestador de salud estatal) para ser revisado.

El Facebook Ballenas de La Pedrera publicó un video con la reacción de la aparición. “A Dios gracias, el chiquilín salió nadando”, dice una señora que filma cómo una decena de personas se juntó en la rambla de La Pedrera. “¡Está bien!”, dice la mujer, que cuenta que el joven está con toda la familia. “¡Qué nervios! A Dios gracias está bien, está contenido por su familia. Estamos acá festejando que todo salió bien”, celebró la mujer.

La mujer describe que el hombre estaba “cansadísimo y agotadísimo”. La mujer contó que le había pedido a las personas que miraran al agua para ver si alcanzaban a divisar al joven. El testimonio del pescador Después de recuperarse, Pereyra contó en una rueda de prensa que estaba acompañado por otros dos compañeros, que viajaban en la “casilla” de la barca pero no se percataron de que él se había perdido. “Yo iba acostado en el gallinero reposando. 

Llevábamos una salida e íbamos a descansar”, narró. Como el mar estaba golpeando la proa, Pereyra se estaba mojando y decidió ponerse un abrigo. Cuando se levantó para hacerlo, cayó al mar. “Antes de caer al agua, pegué el grito: ‘Hombre al agua’. Después grité tres veces más, pero no me sintieron porque el escape de la barca es ruidoso”, contó. Pereyra quedó, entonces, a la deriva en el Océano Atlántico. Desde donde estaba, solo veía una antena en la tierra y aseguró que por su cabeza pasó “de todo”.

“Es una experiencia que es sobrevivir o –también se me pasó por la mente, por decirlo de forma bruta– abrir la boca y ahogarme”, aseguró. Mientras nadaba hacia la orilla, el pescador sintió diez calambres. “Cuando llegué a la costa habían surfistas y se ve que pensaron que estaba con una tabla. Entonces, me miraban nomás. 

Cuando salí sin tabla… (risas). Aparecí por detrás a la gente que me estaba buscando. Los de Prefectura estaban con largavista”, relató. “Fue un milagro y me ayudó la mar. Si fuera un día calmo, si estaba dos horas en el agua me iba a pique. Como la mar me ayudó a tirarme para afuera. Si hubiese estado muy calmo, parece que no pero capaz que no la contaba”, finalizó.

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A UN AÑO DE LA DESAPARICIÓN DE EDUARDO MARTÍNEZ -CONTINÚA EL MISTERIO

 

La noticia de hace un año : 

Eduardo Enrique Martínez Murillo, de 30 años, se encontraba en su casa la mañana del 23 de febrero del presente año, cuando unos supuestos policías vinieron a buscarlo. -Encontramos un barco robado, queremos que nos acompañes para ver si es el tuyo- le dijeron. Eduardo se cambió de ropa, tomó los documentos de su lancha recién robada , salió de la casa, le dijo a sus familiares que pronto regresaría, se subió a la camioneta y se fue. 

 Fue la última vez que lo vieron en Playa Leona, San Carlos. A un mes y 13 días de su desaparición, sus parientes viven una zozobra y no saben de su paradero, pero tienen la esperanza que aparezca sano y salvo. -Yo fui a la DIJ de Chame y San Carlos para ver si ellos habían enviado a un grupo de policías a buscar a mi hermano y me dijeron que no- cuenta Enrique Martínez, hermano del desaparecido. Enrique asegura que a un mes de la desaparición de Eduardo la policía no ha movido un solo dedo para buscarlo. -Voy allá, llamo, pregunto y me dicen que no tienen nada- dice con tristeza.

 Aseguró que Eduardo era un buen muchacho y que no estaba metido en nada malo y desconocen la razón de su desaparición. -Nunca fue amenazado por nadie-dijo. El hijo más pequeño de Eduardo, de 3 años, sigue cada día sintiendo la ausencia de su padre con un dolor muy grande. Todos los días pregunta por vídeo llamada donde está y cuando regresará su progenitor. 

 Enrique dijo que su hermano trabajaba de seguridad y en sus días libres se dedicaba a la pesca. Los familiares de Eduardo dicen que viven angustiados, pero tienen la fe de que él esté con vida. Hacen un llamado a las autoridades competentes para que investiguen más y aclaren este misterio. 

 FECHA 23 febrero del presente año Eduardo Martínez desapareció luego que unos presuntos policías lo fueron a buscar para que verificara un bote robado Se cambió de ropa, tomó los documentos de su lancha recién robada , salió de la casa, le dijo a sus familiares que pronto regresaría 

 Enlace : http://elsiglo.com.pa/cronica-roja/tienen-saber-eduardo/24175555

OLAS en la ZONA DE SAN CARLOS ?

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